¿No sabes si elegir ventanas de PVC o aluminio? Es una duda muy habitual, y no es para menos: la elección afecta directamente al confort, al ahorro energético y, por supuesto, al silencio dentro de casa.

Aislamiento térmico, ruido, estética… cada material tiene lo suyo, y tomar la decisión correcta puede marcar la diferencia entre acertar o arrepentirse.

En este artículo te lo explicamos todo. Sigue leyendo y conoce cuál se adapta mejor a tu hogar y a lo que realmente necesitas.

Primero, ¿Cuál Ofrece Mejor Aislamiento Térmico?

Cuando estás pensando en cambiar tus ventanas, probablemente una de las primeras cosas que te interesa es el aislamiento térmico. Y con razón. Porque si una ventana no es capaz de mantener el calor dentro en invierno y fuera en verano, está haciendo solo la mitad de su trabajo.

Aquí es donde el material del perfil marca la diferencia.

Ventanas de PVC

• Baja conductividad térmica: El PVC no transmite el calor con facilidad, lo que significa que actúa como una barrera natural entre el interior y el exterior.
• Perfilería multicámara: Sus perfiles suelen estar diseñados con varias cámaras de aire internas que mejoran el aislamiento de forma muy eficaz.
• Estanqueidad: Suelen cerrar mejor, evitando filtraciones de aire y pérdida de temperatura. Ten en cuenta que las esquinas de las ventanas PVC suelen soldarse directamente, no atornillarse. Por lo tanto, se evita que se cuele el aire del exterior.

En resumen, si lo que buscas es mantener una temperatura estable dentro de casa sin que se dispare el gasto en calefacción o aire acondicionado, el PVC es una opción muy potente.

Ventanas de Aluminio

• Alta conductividad térmica (salvo si tiene rotura de puente térmico): El aluminio, por naturaleza, transmite el calor más fácilmente. Si no incorpora la tecnología necesaria para evitarlo, como la rotura de puente térmico, pierde eficacia aislante.
• Necesidad de sistemas adicionales: Para lograr un buen nivel de aislamiento, necesita complementos que lo encarecen y complican la instalación.
• Estanqueidad aceptable, pero variable: Su rendimiento puede depender más de la calidad de fabricación y montaje, aunque por lo general suelen atornillarse, lo que no es precisamente un punto a favor.

Con la rotura de puente térmico, el aluminio mejora mucho, pero sigue estando un peldaño por debajo del PVC en aislamiento térmico puro.

En conclusión…

Para saber realmente cuál aísla mejor, fíjate en la transmitancia térmica (W/m2k) de la ventana completa: cuanto más bajo sea ese valor, mejor aislamiento térmico tendrás. Eso incluye tanto los cristales como los perfiles. Este dato puedes encontrarlo primero en las fichas técnicas de nuestros modelos de ventanas en Madrid.

Segundo, ¿Cuál me Aísla Mejor del Ruido?

Ya vimos que el aislamiento térmico depende en gran parte del material del perfil, pero cuando hablamos de ruido, el enfoque cambia un poco.

Aquí entran en juego otros elementos que también debes tener en cuenta…

El acristalamiento

Aunque el perfil importa, lo que de verdad actúa como barrera frente al ruido son los cristales. No todos aíslan igual.

Un doble acristalamiento básico puede servir para ruidos moderados, pero si estás cerca de una vía transitada o vives en un entorno urbano movido, te conviene un acristalamiento acústico: combinaciones de vidrios de distintos espesores o con láminas especiales que reducen la vibración del sonido.

La hermeticidad también importa

Una ventana que no cierra bien, deja pasar tanto el aire como el ruido. En este sentido, las ventanas de PVC suelen ofrecer mejores resultados, porque su sistema de cierre es más estanco. Además, sus perfiles más gruesos y multicámara ayudan a amortiguar el sonido exterior. En cambio, las de aluminio, si no están bien selladas o no tienen buenos complementos, pueden perder eficacia acústica.

Forma de apertura

Si estás pensando en una ventana corredera, cuidado. Este tipo de apertura es mucho más vulnerable al paso del ruido.

Las ventanas abatibles o oscilobatientes, al cerrar con más presión, consiguen un mejor sellado. Y eso se traduce directamente en menos ruido dentro de casa, uses el material que uses.

Esto te ayudará en la comparación…

A la hora de elegir, fíjate en el dato de aislamiento acústico, expresado en decibelios (dB). Cuanto mayor sea, más ruido bloqueará la ventana.

Por ejemplo: una ventana con 48 dB de aislamiento es mucho más eficaz contra el ruido que una de 30 dB. Esa diferencia se nota, especialmente por la noche o si trabajas desde casa y necesitas concentración.

Vale, ¿Y qué Hay de la Estética?

Sabemos que una ventana no solo aísla, también se ve. Y mucho. Pero la buena noticia es que tanto el PVC como el aluminio han evolucionado mucho en este sentido, y hoy en día puedes encontrar acabados para casi cualquier estilo de vivienda.

Las ventanas de aluminio destacan por su variedad de colores y texturas, incluyendo tonos metálicos, mates, brillantes e incluso efectos anodizados.

Por otro lado, las ventanas de PVC han dejado atrás su imagen blanca tradicional. Actualmente puedes elegir entre una gran gama de acabados, como imitaciones de madera, colores neutros o lacados especiales que imitan al aluminio. Además, algunos modelos ofrecen acabados diferentes por dentro y por fuera, adaptándose al estilo interior y a la fachada.

Si tienes dudas durante la elección de tus nuevas ventanas, contáctanos y te asesoraremos con todo el gusto.